QUE A TU PERRO NO LE DE MOQUILLO

Últimamente a echo frío en Monterrey, y me e dado la tarea de conseguirle a mis perros cobijas y ponerles un lugar acondicionado para que no les entre viento y frío, pero, hace unos dias note algo extraño en uno de mis perros.

"El Orejas" (nombre de mi perro) estaba  triste, no salía de su casita y cuando salía apenas comía, dormía todo el día, estornudaba muy seguido, y sus ojos estaban muy llorosos, estaba mas calientito de lo normal y temblaba mucho.

Bien, nuestro pequeño perro no nos puede contar que le duele o como se siente, pero si eres observador y conoces el comportamiento de tu mascota veras que siempre da señales de que sufre alguna dolencia, asi podremos identificar las enfermedades desde un  principio y actuar lo más rápido posible acudiendo a un veterinario.

¿Como podemos ayudarlo?  Tócale con cuidado por todo el cuerpo para identificar posibles focos de dolor. El perro reaccionará con irritación cuando presiones la parte del cuerpo del perro que le molesta.

Los perros enfermos cambian su forma de comer, seleccionan cuidadosamente lo que comen, beben mucho o beben poco agua y empiezan a morder objetos de manera desesperada.

ALGUNOS DE LOS SINTOMAS QUE HAY QUE TENER EN CUENTA:

-    Hipotermia (baja temperatura o fiebre)

-    Respiración acelerada

-    Pulso lento o taquicardia

-    Sangre en la heces, orina o vómito.

El virus del moquillo se llega a transmitir por:

•Contacto directo con fluidos corporales de un perro infectado.

•Contacto directo con comida y agua contaminadas por estos fluidos.

•Contacto directo con los lugares contaminados (cualquier parque o zona habitual para perros puede ser caldo de cultivo de esta enfermedad).

•Una corriente de aire.

La enfermedad puede durar sólo diez días, pero puede extenderse a varias semanas y hasta meses, con períodos de mejora seguidos de una recaída.

TRATAMIENTO

Como en la mayoría de las enfermedades virales, el tratamiento sirve de apoyo para consolidar y fortalecer el sistema inmunológico y para prevenir una infección secundaria. 

No existe ningún tratamiento específico para curar esta enfermedad, la previa vacunación es el único medio que protege al perro, y aun así no es el 100% efectiva.

La vacuna contra el distemper es muy eficaz y no presenta ningún peligro. Se debe administrar al cachorro a los 2 meses de edad, aplicando una segunda dosis al cabo de un año. Las demás repeticiones se deben suministrar cada dos o tres años durante toda la vida del animal.

NO OLVIDES, NUNCA MEDICAR A TU MASCOTA Y LLÉVALO CON TU VETERINARIO DE CONFIANZA